El maltrato doméstico es cualquier tipo de comportamiento realizado a una pareja o pariente íntimo que le hace tener poder sobre el otro. Estas acciones pueden ser físicas, sexuales, emocionales, financieras y espirituales.
Abuso físico
Esta es la forma más reconocida de abuso. Incluye comportamientos físicos como pegar, abofetear, dar puñetazos, patear, quemar, estrangular, dañar la propiedad personal, rechazar la atención médica y/o controlar la medicación, coaccionar a la pareja para que abuse de las sustancias y utilizar armas.
Abuso sexual
El abuso sexual es cualquier acto sexual realizado sin consentimiento. Algunos ejemplos son: coaccionar a la pareja para que mantenga relaciones sexuales sin protección o sabotear los métodos anticonceptivos, buscar la actividad sexual cuando la víctima no es plenamente consciente o tiene miedo de decir que no, mantener relaciones sexuales cuando el consentimiento no está claro, herir físicamente a la pareja durante las relaciones sexuales, retirar el preservativo durante las relaciones sexuales sin consentimiento y obligar a la pareja a mantener relaciones sexuales con otras personas.
Abuso emocional
El abuso emocional se produce cuando una persona utiliza medios emocionales para manipular y controlar a otra. Los comportamientos emocionales son los insultos, la culpabilización, los celos extremos, la intimidación, el avergonzamiento, la humillación, el aislamiento, el control de las actividades y los movimientos y el acoso.
Abuso tecnológico
El abuso tecnológico es el uso de diversas tecnologías para mantener el poder y el control de alguien en una relación de pareja. El abuso tecnológico puede ocurrir a personas de todas las edades, pero es más común entre los adolescentes que utilizan la tecnología y las redes sociales para interactuar de una manera que a menudo no es supervisada por los adultos.
Abuso financiero
Cualquier comportamiento que mantenga el poder y el control sobre las finanzas constituye un abuso financiero. Algunos ejemplos son tener que rendir cuentas de cada céntimo gastado, restringir el acceso a las cuentas bancarias y a las tarjetas de crédito, recibir una asignación, que le roben el dinero por abuso, hacer que la pareja pierda su trabajo por medios directos e indirectos y dañar la puntuación de crédito de la pareja.
Abuso espiritual
El abuso espiritual o religioso es más difícil de detectar que cualquier otro tipo de abuso. Se produce cuando una persona intenta controlar y manipular a la otra utilizando la religión como justificación. Esto puede adoptar la forma de ridiculizar o insultar las creencias espirituales de una persona, impedir que una persona practique sus creencias religiosas o espirituales, utilizar las creencias de una persona para manipularla o avergonzarla, obligar a los niños a ser criados en una fe que no ha sido acordada por ambos miembros de la pareja, utilizar textos o creencias religiosas para minimizar o racionalizar los comportamientos abusivos.