Cualquiera puede sufrir malos tratos

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Una antigua voluntaria comparte su historia de Retiro:

El maltrato es un problema insidioso y generalizado que afecta a innumerables vidas en nuestra comunidad.

Es fundamental que comprendamos que los malos tratos no conocen fronteras: afectan a personas de todas las edades, sexos, razas y entornos socioeconómicos. Nadie es inmune, y ocurre aquí mismo, en nuestra propia comunidad.

Un ejemplo perfecto de ello ocurrió un día que trabajaba como voluntaria en la oficina de The Retreat. Alguien de mi círculo social llamó al timbre para concertar una cita con uno de nuestros asesores. No tenía ni idea de que estaba en una relación abusiva. Nunca se sabe lo que ocurre en los hogares y las relaciones de nuestros amigos y compañeros. Parecía avergonzada de que alguien que conocía la reconociera, así que actué como si no la conociera. 

Sin embargo, ahora sé que estaba allí para elaborar un plan de seguridad para ella y sus hijos para salir de su relación abusiva.  

Nunca he hablado con ella sobre este incidente, ya que tenemos normas de confidencialidad muy estrictas en El Retiro, pero me complace informarles de que se divorció de su marido y actualmente está prosperando en una relación amorosa y saludable. Sus hijos son felices, están seguros y bien adaptados. Esto se debe al apoyo del personal de El Retiro.

El maltrato no es sólo físico. Como la experiencia de mi amigo, puede ser emocional, psicológica y financiera. Deja cicatrices que no siempre son visibles. El ciclo del abuso puede ser implacable, atrapando a las víctimas en un círculo de miedo y desesperanza. 

Pero ahí es donde El Retiro ¡Entra! 

Concienciando, ofreciendo apoyo y abogando por el cambio, podemos crear una comunidad más segura y compasiva en la que todos puedan prosperar sin miedo. Permanezcamos juntos, unidos contra los abusos, y trabajemos para construir un futuro mejor para todos.

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